El juego no solo sirve para divertirse, también para aprender
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El juego con tu perro es parte muy importante de su bienestar, ya que a través de actividades como lanzar la pelota o simplemente perseguirse, lo mantienes activo y refuerzas el vínculo entre ambos.
Sin embargo, estos no son los únicos beneficios, de hecho, por medio de estas actividades también pueden enseñar a tu mascota a comportarse correctamente.
El juego diario se convierte en un ejercicio de constancia para el animal, esto ayuda a crear una rutina en la que los tiempos de calma en casa y de correr en el patio o en el parque están bien definidos, así que difícilmente estará inquieto en el hogar.
De hecho, también es muy bueno para la ansiedad por separación, ya que si juegas con el animal antes de irte, estará cansado y preferirá reposar en lugar de ladrar hasta que regreses.
Por medio de los ejercicios recreativos, incluso puedes enseñarle órdenes e instrucciones, piensa en cosas sencillas como «quieto» o » suelta», son indicaciones aplicables tanto en el juego como en el día a día.
Estas lecciones, impartidas de manera divertida, reducirán el estrés que puede llegar a surgir durante los periodos de entrenamiento, y pueden reforzarlas con premios o golosinas especiales para canes.
No todos los ejercicios son físicos, también puedes fomentar la agilidad mental de tu mascota, hay muchos accesorios tipo rompecabezas que sirven justamente para este propósito.
Es muy importante que nunca obligues a tu mascota a hacer nada que no quiera, si notas que un determinado juego no le gusta, entonces intenta con otro.
